lunes, 24 de septiembre de 2007

Capitulo 7: Nunca dejare de ser un poco guiri

Buenas a tod@s de nuevo,
Hoy estreno oficialmente el blog. Como veréis he cargado algunas de las crónicas antiguas, junto con algunas fotos. Así, quien quiera visitar el blog de vez en cuando podrá hacerlo sin que os llene el inbox de vuestro correo con crónicas basura...
Muchos os preguntareis si finalmente conseguimos el permiso de residencia para Juan... NO, aun no lo tenemos! Imposible pero cierto; ya me temía yo que no podía ser tan "fácil"... Esperamos poderlo recoger esta semana. Por favor, encended algunos cirios en la iglesia más próxima...
Aquí la vida continúa... El viernes pasado salí a cenar fuera y aguanté despierta hasta las 12! Todo un reto en una ciudad en la que la humedad y el calor consiguen que a una se le cierren los ojos a las 10h. Bueno, algunos diréis que en Barcelona tampoco aguanto mucho más... cierto, no lo puedo negar... Conocí a un grupo de pilotos, dos españoles, un italiano y un sueco así como a una chica de USA. Todos muy majetes.
Luego, ayer me fui un ratito a la playa y guiri de mi, me olvidé la crema protectora en casa. Hoy no puedo ni moverme y la ropa más finita parece papel de lija. Si le busco la parte divertida es que los locales no saben lo que me pasa, y muchos me preguntan a que se debe esa cara tan roja y que me queje en todo momento si alguien me roza...
También aproveché el fin de semana para llevar a los hijos del jardinero a un parque con columpios de Dar. Increíble, era su primera vez y no hubo quien resistiera el mareo de los columpios. Creo que no disfrutaron demasiado. Eso si, el mejor momento del día es cuando voy a casa de Pep y al abrir la verja de la entrada veo esas cabecitas que me reciben con una sonrisa de oreja a oreja. Son felices al verme y me hacen feliz a mi.


Pues nada mas... Besitos de una gamba a la tanzana.
Kwa Heri

Anna

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